volver a ser niño¿Recuerdas cuando eras niño? Todo lo que podías imaginar, lo podías hacer. Te convertías en un pirata solo poniéndote un parche en el ojo y empuñando una espada que habías construido con un trozo de madera, o te transformabas en una princesa de cuento con tan solo calzarte los zapatos de tacón de mamá.

Cuando te atabas una sábana alrededor del cuello a modo de capa y extendías el brazo hacia delante, corrías por toda la sala creyendo volar. ¿Recuerdas esa sensación? Que bien te sentías ¿Verdad? No había nada imposible para ti, no tenías miedo a nada. Y te divertías terriblemente…

Cuando dejábamos volar nuestra imaginación, algo que hacíamos con mucha más frecuencia que ahora, cuando nos permitíamos soñar despiertos, nos gustaba imaginarnos viviendo mil y una aventuras. Entonces éramos pequeños y con la inocencia propia de la edad no sabíamos que a medida que fuéramos creciendo, todos esos sueños se irían desvaneciendo hasta quedar relegados al olvido. Esa vida apasionada que soñábamos de niños ha terminado por convertirse ya en nuestra madurez en una vida rutinaria, aburrida y en el peor de los casos triste.

Ese niño que eras sigue vivo en ti aunque no lo oigas, le han dicho tantas veces que no haga ruido, que no moleste, que ahí está en silencio, sentado en un rincón de tu corazón, como si estuviera castigado, con las piernas cruzadas y cabizbajo. A ese niño que habita en tu interior esta vez no le ha castigado ni su padre, ni su madre, le has castigado tú. Ya va siendo hora de que le levantes el castigo.

volver a ser niño¿Qué te parece si dejas que salga? Puedes hacer que ese niño vuelva a sentirse vivo, que vuelva a jugar, a reír, a divertirse, a vivir el momento, a descubrir con inocencia nuevas maneras de ver el mundo.

Diviértete creando, pon a prueba tu imaginación, aprende, sé curioso, experimenta nuevas sensaciones, recupera la capacidad de asombrarte, agradece lo que tienes, cambia lo que no te gusta, arriésgate, no te quedes con las ganas, porque la vida está para disfrutarla, para exprimirla al máximo. Recupera tu pasión, haz eso que siempre has querido hacer.

Y lo más importante sé tú mismo no te dejes influenciar por la opinión de los demás, solo tú sabes lo que es mejor para ti.

¿Aceptas la responsabilidad que supone volver a ser niño? Porque ser niño implica volver a hacer cosas verdaderamente importantes.

Mónica Tello.

Fragmentos de mi libro Saca el superhéroe que llevas dentro.

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here