Lord Serapis Blay, Choan del Cuarto Rayo, explica las 7 pruebas que debe superar con éxito cualquier candidato a la Ascensión. Te las mostramos.
Primera:
El candidato debe aprender a controlar y transformar todos los pensamientos y sentimientos que no estén alineados con su Ser Divino. Esta es la iniciación de maestría del primer templo, el templo de la voluntad de Dios, que aquellos que tienen esperanza y son valientes deben pasar.
El candidato debe aprender a comunicarse con su propia Presencia de Dios y desarrollar dentro de sí mismo verdadera humildad ante Él.
Dentro de este primer templo, bajo la dirección del maestro el Morya y sus asistentes, el aspirante es asistido en la disolución de la rebeldía.
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Dentro de la disciplina está una buena noche de sueño, abstinencia de fumar, alcohol y drogas. Esto puede facilitar su camino a su libertad gloriosa.
Aquellos que no desean aceptar estas disciplinas todavía no tienen el estímulo de llegar a ser la más grande y alta expresión de un Dios encarnado.
Segunda:
Aquellos que han pasado con éxito las iniciaciones del primer templo son llevados al segundo templo conocido como el templo del aprendizaje. Bajo la guía de Lord Lanto, el Maestro Kuthumi, y la Hermandad de la vestidura dorada ellos reciben instrucciones en la ley.
Aquí desarrollan un entendimiento de la ley de causa y efecto y todas las otras leyes universales. Es un tiempo placentero y feliz de sembrar las semillas, de respirar vida sobre esas semillas y traer la cosecha del trabajo. Es el momento en que el artista desarrolla su habilidad, el músico desarrolla la destreza en sus logros musicales, y el maestro llega a ser elocuente en transmitir su conocimiento a sus estudiantes.
Tercera:
Aquellos que han pasado con éxito las iniciaciones del Segundo Templo son llevados al Tercer Templo, el templo del amor, bajo la gran protección y guía del amado Pablo Veneciano. Aquí el neófito debe aprender la disciplina del amor incondicional y la armonía para su propia corriente de vida, y para todas las otras formas de vida.
Ellos son colocados en viviendas con aquellos que tienen, dentro de sí mismo, tendencias las cuales son particularmente irritantes para otros.
Entonces es cuando el número de neófitos disminuye y con un gran sentimiento de alivio muchos de los candidatos corren hacia la puerta y se van. Vivir en paz con el prójimo es una de las más grandes Pruebas del Estado no-ascendido.
Aun cuando la amabilidad, la belleza, y la benevolencia de este gran maestro son asombrosas, como para derretir un corazón de piedra, la disciplina que él requiere para aprender tolerancia, compasión y entendimiento es tal, que pocos sobreviven.
Cuarta:
Desde el tercer templo, el iniciado es movido dentro del cuarto templo, el templo de la Ascensión. Este es el primer contacto personal que Serapis Bey tiene con el neófito. Por primera vez el candidato debe traer suficiente pureza para ver su presencia del YO SOY y su ser del Cristo Sagrado cara a cara.
En la iniciación, el maestro mismo se parará dentro del aura del iniciado mostrando los muchos balances negativos, los cuales todavía existen dentro de los cuerpos internos.
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Entonces es cuando el candidato escuchará muchas voces y solamente la verdadera discriminación, la oración, el dar sin egoísmo, y la humildad podrán hacerle discernir la voz del silencio. Es el momento cuando el Ser aprende los trucos del Ego y su sutil apariencia. El aspirante debe aplicarse a purificar todas las creaciones negativas humanas del pasado, y transformarlas en un resplandor de luz pura blanca.
Quinta:
Después de pasar la iniciación del cuarto templo el discípulo está listo para la disciplina del quinto templo, el templo de consagración. Es entonces que el vestido de consagración es colocado sobre ellos, sandalias doradas en sus pies y una sotana de seda en sus cuerpos.
El Maestro Hilarión, o el amado Rafael, llevan a cabo el servicio de consagración donde todos los sistemas del cuerpo son consagrados a la pureza y ascensión. Entonces, consagraciones son dadas de las manos, dentro de las cuales la llama de sanación es infundida, y de los pies, los cuales vienen a ser el soporte del fuego sagrado donde quiera que el cuerpo se mueva. La consagración de los labios toma lugar para hablar las palabras sagradas, las cuales invocan y comandan la manifestación de los poderes de precipitación y sanación. Consagración de las energías de los ojos que permiten Ver la perfección, llamar por ella, esto completa la ceremonia.
Sexta:
El aspirante es entonces tomado al sexto templo, el templo de servicio, dónde se espera que él ponga a un lado, temporalmente, sus aspiraciones mundanas, para estar en servicio de otros y para llegar a ser el guardián de su hermano.
También se espera de él que sea voluntario, parte de su tiempo, para el servicio planetario, para el beneficio del género humano, no solamente para él mismo y su familia. Él debe aprender a incluir al resto de la humanidad en su corazón, llegando a ser completamente consciente que las necesidades de otros también afectan las necesidades de muchos.
En el sexto templo, bajo el patrocinio de Lord Sananda con su amada alma gemela Lady Nada, también conocidos como Jesús y María Magdalena, el aspirante es entrenado para nutrir y servir todos los aspectos de la vida y llegar a ser un sirviente ministerial.
Antes de que el candidato para la Ascensión pueda llegar a ser un maestro, debe aprender también las disciplinas del sirviente humilde, del servicio sin retribución personal, verdadera hermandad, y obediencia a la jerarquía.
Aquellos que han pasado casi todas sus vidas en el servicio de alguna actividad u organización, para asistir a mejorar la conciencia del colectivo, son normalmente iniciados del sexto nivel .En el pasado Serapis Bey vio a muchos de ustedes marchar de Luxor con el convencimiento de unirse a los Servidores de la Luz, para ayudar al cambio planetario pero muchos perdieron la fuerza y la fe retrocediendo en su actitud apenas abandonaron el Gran Templo, perdiendo así su oportunidad para la Ascensión en muchas encarnaciones.
Séptima:
Después que el aspirante pasa las iniciaciones de los primeros seis templos, él está listo para entrar en el séptimo templo, el Templo del Fuego Violeta, donde cada átomo, célula y electrón de su ser, viene a ser completamente purificado por la acción de la Llama Violeta, bajo el patrocinio del Maestro Saint Germain.
El candidato llega a ser como una ventana, a través de la cual, la vida de Dios fluye con pureza absoluta. El cuerpo físico les dará las más grandes posibilidades con suavidad y gracia, dentro de las leyes de la armonía, si se abstienen de tomar dentro del cuerpo físico aquellas sustancias que cambian la acción vibratoria natural, desconectándolo de la armonía de las esferas del amor divino.
Cuando el candidato está listo para exteriorizar completamente la voluntad de Dios y empieza la preparación para iniciar la fase final de la ceremonia de graduación de la Ascensión, entonces todo está listo para que el candidato llegue a ser un maestro ascendido.
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Extraído del libro Las Siete llamas sagradas Aurelia Louise Jones.
