Porque con una actitud mental positiva se consiguen grandes objetivos, hoy vamos a compartir con vosotros una breve fábula sobre tres leones y su actitud para lograr el reinado de la selva.
Fábula de los tres leones
En una selva vivían tres leones. Un día, el representante elegido por los animales de la selva, el mono, convocó a una asamblea a todos los animales para comentarles una problemática que había observado y para pedirles una toma de decisión sobre el mismo.
En la reunión, el mono comenzó diciendo: Buenos días amigos, como todos sabemos, el león es el rey de los animales, y en nuestro caso, tenemos un gran dilema.. Os cuento: El caso es que en la selva existen tres leones y los tres son muy fuertes. ¿Cuál de ellos va a ser nuestro rey? ¿A quién tenemos que obedecer? Pensarlo y mañana volvemos a convocar una reunión para hablar del tema.
Acabada la reunión, los leones se reunieron y comentaron entre ellos:
La preocupación de los animales tiene mucho sentido, una selva no puede tener tres reyes, sería una locura, pero ¿cómo elegimos al rey entre los tres?. Pelear no vamos a hacer porque somos muy amigos….
Al día siguiente a la misma hora, los animales se reunieron otra vez y después de mucho deliberar, llegaron a diseñar una propuesta para los leones. El mono, como portavoz les comentó:
Amigos leones, hemos encontrado una posible solución para decidir a quién vamos a rendir obediencia. Entre todos hemos diseñado la siguiente propuesta: hoy a la tarde vais a escalar la Gran Montaña Dificil y el primero que alcance la cima será nuestro Rey.
La Gran Montaña Difícil era la montaña más alta y complicada conocida de toda la selva. El reto fue aceptado por los tres leones con una “actitud mental positiva”, les parecía una forma limpia de competir por el reinado. Todos los animales ansiosos asistieron a la gran ascensión.
El primer león comenzó la escalada, pero a medio camino tuvo que abandonar. El segundo león, viendo que el primero había abandonado, empezó a subir con todas sus fuerzas, pero también tuvo que abandonar. El tercer león también fue derrotado por la Gran Montaña y bajó hundido.
Entre los animales comenzó un murmullo; si los tres habían abandonado, otra vez estaban con la misma problemática ¿A quién iba a nombrar Rey?. En ese momento, un águila muy sabio pidió la palabra al mono y les dijo:
¡Tengo la solución a la elección del Rey, yo sé a quién vamos a nombrar como nuestro Rey! Todos los animales silenciaron su murmullo, se miraron los unos a los otros y centraron sus miradas al águila esperando impacientes su respuesta:
El águila comenzó. La solución es muy sencilla. Yo volaba cerca de ellos en el momento que bajaban de la Gran Montaña derrotados y escuche lo que cada uno decía a la Montaña. El primer león dijo en tono derrotado: – ¡Montaña, me has vencido!. El segundo león dijo en tono pesimista: – ¡Montaña, me has vencido! y el tercer león dijo: – ¡Montaña, me has vencido, hoy! Pero tú llegaste a tu tamaño final y yo todavía estoy creciendo; volveré con más fuerza y te derrotaré.
Habiendo escuchado estas palabras, el tercer león actúo con una actitud mental positiva, característica imprescindible en todo líder.
Ante esta reflexión, los animales aplaudieron primero al águila por haberles ayudado a solucionar el dilema que presentaban y después al tercer león, que fue coronado con el Rey de la Selva.
Por tanto, por muy difícil y ambiciosa que sea vuestro objetivo, no abandonéis, mantener una actitud mental positiva y eso os dará fuerza para alcanzar vuestra meta.
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