Ayudar en su justa medida: fábula del campo fértil

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En esta ocasión vamos a compartir con vosotros esta fábula sobre lo importante que es ayudar en la justa medida.

Y es que, ayudar a los demás está muy bien y es necesario, pero si rebasamos la línea y ayudamos demasiado, podemos propiciar a que a quién prestamos es ayuda sea incapaz de valerse por si mismo, lo debilitaremos en lugar de ayudarle a desarrollar armas y recursos propios que lo hagan un ser grande.

Recordar: “si le das un pescado a un hombre comerá una vez, pero si le enseñas a pescar, comerá toda su vida”

Ayudar en su justa medida: fábula del campo fértil 1

Fábula del campo fértil

Un Maestro dejó a uno de sus discípulos un arrozal para que lo trabajara y cuidara durante tres años.

Al finalizar el primer año, el Maestro se acercó al campo para comprobar la cosecha, y verificó que había sido muy buena.

Su discípulo le contó que había provisto a la tierra de todo el agua que necesitaba, que ese había sido el secreto de su éxito en la cosecha de este año.

Transcurrió el segundo año, y resultó que la cosecha fue todavía más abundante que la del año anterior.

Esta vez, el discípulo comentó al Maestro que durante todo el año había abonado convenientemente el campo.

Así llegó el tercer año, y cuando éste llegó a su término, el Maestro, como todos los años anteriores, se dirigió al arrozal para comprobar los resultados obtenidos.

Pero al comprobar lo que había obtenido, se llevó un gran disgusto.

Resulta que el discípulo, entusiasmado con lo producido con los años anteriores, abonó y regó demasiado la tierra, y aunque ésta dio muchísimo arroz, era tan pequeño y frágil que no servía para comerciar con él.

Por lo tanto, fue una cosecha inútil, y  el trabajo realizado en realidad no había dado ningún fruto.

Así, el Maestro dijo a su discípulo: “Esto es lo que quería que aprendieses, porque así pasa con las personas. Fortaleces a alguien cuando le ayudas un poco, pero si le ayudas demasiado, lo debilitas. “

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“El verdadero amor no es otra cosa que el deseo inevitable de ayudar al otro para que sea quien es”Jorge Bucay

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