
Los maridos y las mujeres no deben intentar cambiar a sus parejas y hacer de ellas una copia de sí mismos. El intento poco sutil de cambiarlas es una afrenta, una afirmación de que no valen nada en sí mismos.
No intentes cambiar a tu pareja
Estos intentos son siempre en vano y en muchas ocasiones conducen a la destrucción del matrimonio. Intentar cambiar a alguien destruye el orgullo y la autoestima, y crea un espíritu de contrariedad y resentimiento que puede resultar fatal para el lazo de matrimonio.
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Por supuesto, se necesitan hacer ajustes. Nadie es perfecto y eso también se puede aplicar a los casados. Pero si echas un vistazo al interior de tu mente y estudias tu carácter y tu comportamiento, encontrarás bastantes defectos para mantenerte ocupado el resto de tu vida.
Si piensas: “haré que se convierta en lo que yo quiero que sea”, entonces estás buscando problemas y el juzgado para divorciarse. Estás pidiendo infelicidad. Tendrás que aprender a las malas, que no hay nadie que le va a cambiar excepto tú.
Rezad juntos y permaneceréis juntos
Primer paso: Nunca acumules de un día para otro enfados que surgen de pequeños roces. Aseguraos de que os perdonáis el uno al otro por cualquier comentario molesto antes de iros a dormir por la noche.
Al despertar por la mañana, afirmar más que la inteligencia infinita os guía en todo lo que hacéis. Enviad pensamientos de paz, armonía y amor a vuestra pareja, a todos los miembros de la familia y al mundo entero.
Segundo paso: Da las gracias en el desayuno. Gracias por la maravillosa comida, por la abundancia que tienes y por todas las bendiciones que te han sido otorgadas. Asegúrate de que ningún problema se introduce en la conversación de sobremesa; lo mismo se debe aplicar a la hora de la cena.
Dile a tu mujer o marido: Valoro mucho todo lo que estás haciendo, me encantas, tengo mucha suerte de tenerte a mi lado, te quiero y te aprecio con todo mi corazón.
Tercer paso: El marido y la mujer deben turnarse cada noche en las oraciones de afecto. No des por sentado que tu pareja está ahí. Demuéstralo con tu afecto y tu amor. Ten pensamientos de afecto y buena voluntad, en lugar de los de condena, crítica y resentimiento.
La forma de construir un hogar Pacífico y un matrimonio feliz es utilizando los cimientos del amor, la Belleza, el respeto mutuo y el humor. Antes de iros a dormir, leer obras espirituales y formativas pertenecientes a las numerosas religiones y filosofías qué han ayudado a las gentes a través de los tiempos.
Consejos e ideas rápidas para mantener una buena relación duradera
- La ignorancia de las leyes mentales y espirituales es la causa de toda infelicidad conyugal. Rezando juntos científicamente, permaneceréis juntos.
- El mejor momento para prevenir el divorcio es antes del matrimonio. Sabiendo rezar de la forma correcta atraerás a la pareja perfecta para ti.
- El matrimonio es la unión de un hombre y una mujer que están unidos por el amor y sus corazones laten como uno solo. Sé consciente de lo que esto significa.
- El matrimonio no garantiza la felicidad, pero si contribuye a la felicidad y alegría mutua
- Atraerás a la pareja perfecta amparándote en las características y cualidades que admiras de un hombre o una mujer.
- Debes crear en tu mentalidad el equivalente mental de lo que quieres en la persona con quién te cases.
- Deja de proyectar patrones mentales de miedo sobre tu pareja. Proyecta amor, paz, armonía y buena voluntad. Tu matrimonio será más hermoso y maravilloso con el paso de los años.
- Irradiaros amor, buena voluntad el uno al otro dando como resultado confianza mutua, afecto y respeto.
- El amor se demuestra con hechos no con palabras. Pasa a la acción. Comienza hoy, ahora mismo, haz algo que la sorprenda y encienda la chispa.
- Nunca intentes cambiar la forma de ser de tu mujer o marido. Estos intentos terminan por destruir el orgullo y la autoestima del otro.
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